Por Jesús Valencia Farías
11 de Septiembre del 2012
Los Reyes de Salgado-"¿Quién no ha sentido una
frustración por no poder hacer algo, o porque algo se sale de su alcance?, esa
es la misma frustración que se siente en la silla de ruedas al llegar a una
banqueta donde no hay rampa o esa rampa esta obstruida, señaló Juan Manuel Fernández Rodríguez
psicólogo y responsable del consejo de desarrollo cultural municipal, al ser
interrogado sobre el accesibilidad a diferentes espacios en su silla de ruedas.
Indicó que no solo se trata de tener o no acceso a
espacios públicos, sino que incluso se arriesga hasta la vida al no poder
circular por las banquetas, y tener que circular por los bordes con el riesgo
de recibir un golpe por parte de un automóvil o motocicleta que al más leve
rozón podría voltear la silla.
Destaco que es necesario que las personas con alguna
limitación física sean actores de los proyectos necesarios para buscar el
respeto a los espacios públicos y generar los cambios necesarios para dar más
accesibilidad en la vía pública a las personas con alguna discapacidad del tipo
que sea.
Dijo que de lo contrario al no ser el actor y no
incluirse, en primera los cambios que se hagan no van a ser de acuerdo a las
necesidades; las rampas podrían no estar al nivel que se necesitan, o los
espacios podrían no ser de las medidas adecuadas para hacer entrar una silla de
ruedas por una puerta, por ejemplo.
Comentó que se habla de un quince por ciento de la
población que tiene alguna limitación física, y de esos entre un 80 o 90 por
ciento podrían aun pensar que la vida está en deuda con ellos, por estar en
cierta situación y esperan que las autoridades o alguien les resuelva su
problemática, cuando en lo personal creo que es responsabilidad de quien la
tiene.
Por otra parte explico que también hay lo que es la
discapacidad temporal debido a personas que se fracturan, las señoras
embarazadas; antes y después del parto, o cuando transportan en la carreola a
su bebe, por lo que lo que se habla de más de un 50 por ciento de personas que
en su momento requieren que existan rampas, banquetas estandarizada, pasamanos
en las escaleras, puertas con el suficiente espacio para entrar, baños, entre
otros servicios.
Agrego que piensa que las autoridades y la ciudadanía
en general no son adivinos para saber que requieren exactamente las personas
con alguna limitante física, por lo que invita a las personas que en silla de
ruedas, en muletas, con alguna discapacidad visual, etcétera., a que salgan a
las calles y pongan en evidencia lo que es necesario en la vía pública para
ellos.
Finalmente expreso que sería cuestión de que se
aplicara el respeto al que todos tenemos derecho, sin importar nuestras
capacidades o limitaciones; el respeto a la convivencia con cualquier tipo de
personas, porque en lo personal como psicólogo esta cuestión de la discapacidad
la ubico en todas las personas ya que, ¿Quién no ha sentido una limitación por
no poder conseguir algo o porque algo se salió de su alcance?
No hay comentarios:
Publicar un comentario