Los suelos de origen volcánico tienen propiedades y nutrientes esenciales para el desarrollo de cualquier tipo de cultivo agrícola

Por Jesús Valencia Farías

09 de Septiembre del 2012

Capas de suelo volcánico en las cercanías del cerro de Los Limones en Los Reyes

Los Reyes de Salgado.- En el ámbito agronómico es muy conocido que los suelos donde hubo actividad volcánica son muy ricos,  porque regularmente las capas de ceniza y arenas de origen volcánico, contienen diferentes tipos de minerales esenciales para la nutrición de cualquier tipo de cultivo, indicó el agrónomo Alejandro Sánchez Lomelí del Bufet de Consultoría Agrícola (Bucosa).

Zarzamora cultivadas en Los Reyes 

Señaló que los minerales son la parte costosa de la agricultura, porque si en algo se gasta es en los fertilizantes, por lo que los suelos enriquecidos por el efecto de la actividad volcánica son excelentes para cualquier tipo de cultivo.

Es decir además de que aportan minerales mejoran la estructura porque un suelo arenoso tiene propiedades fisicoquímicas mucho mas apropiadas para la agricultura que un suelo con otro origen.

Dijo que los suelos ideales para cultivar son los de migajones arenosos o arcillosos porque tienen muy buen drenaje e intercambio de nutrientes, así como una excelente capacidad de intercambio catiónico y baja cantidad de sales, además que regularmente no tienen cloro, por lo que condiciones como esas son casi perfectas para el desarrollo de los cultivos.

Explicó que para el caso particular de Michoacán tenemos la ventaja de tener suelos forestales de origen volcánico, gracias al “Eje Neovolcánico Transmexicano” al que pertenecen los volcanes de el Pico de Tancitaro o el Paricutin, los cuales están rodeados de huertas de aguacate.

Aguacates cultivados en suelos volcánicos en Los Reyes

Apuntó que en Michoacán somos líderes a nivel mundial en la producción de aguacate gracias a este tipo de suelos andosoles, color oscuro y muy poroso, que en el caso particular de los que rodean el volcán Paricutin, el más joven del mundo, fueron nuevamente embutidos en 1943 de cenizas y otros materiales volcánicos que enriquecieron su composición.

Comentó que el aguacate requiere principalmente suelos que tengan un buen drenaje, que no retengan mucho la humedad porque las raíces de sus arboles son muy delicadas.

Mencionó que con el mejoramiento inducido de suelos pobres en nutrientes o drenaje; agricultores han depositado miles de toneladas de arenas y arcillas en sus huertas con lo cual han buscado mejorar la textura de la tierra para proveerla de mayor fertilidad e intercambio de nutrientes.

Parcela de zarzamora en Los Palillos

Detalló que clasificación de suelos en cuanto a su estructura tiende a ser en tres elementos; por un lado el limo que se refiere más que nada a la materia orgánica, por otra parte la arcilla que todos conocemos como el barro y las arenas que por lo regular son las que en una buena proporción hacen la diferencia entre un suelo fértil a un suelo infértil.

Agregó que los suelos de origen volcánico son muy variables en cuanto a su composición de minerales, porque por ejemplo las arenas y arcillas que están por el rumbo del cerro de Los Limones en colindancia con Jalisco donde hay aguacate sembrado, podrían ser muy ricas en potasio o silicio pero de la misma forma esos contenidos podrían variar en la zona del Paricutin o Tancitaro.

Finalmente mencionó que es muy importante que los agricultores hagan análisis de sus tierras de cultivo ya que las plantas como los seres humanos requieren de una dosificación de nutrientes especifica y la ausencia de un nutriente lleva a la deficiencia en el desarrollo de la planta y su fruto, de la misma forma que una sobredosificación puede llevar a la toxicidad tanto de la tierra como de lo que produce.

Huerta de aguacate de producción orgánica en un 80 por ciento gracias a los minerales y propiedades del suelo volcánico en las cercanías del cerro de Los Limones en Los Reyes